Son muchas las variables que intervienen en la definición del precio de un producto/servicio. Y, también, son varios los modelos que pueden utilizarse para ponerle precio a las cosas. Tanto si eres una pyme como si trabajas en una empresa más grande, agradecerás contar con tecnología que facilite la formulación automática de precios. Sencillamente porque es imposible tener en cuenta todas las variables y actuar a la velocidad que exige el mercado sin ayuda tecnológica. En todo caso, en este artículo te explicamos el por qué y el cómo de la formulación automática de precios.
¿Te has preguntado alguna vez, cómo se determina lo que vale un producto/servicio? A mí me genera mucha curiosidad saber cómo impacta cada una de las variables implicadas (coste de fabricación/adquisición, coste de comercialización, condiciones de mercado, comportamiento de la demanda, competencia, …) Y, me genera aún más curiosidad, entender la capacidad de respuesta de un establecimiento -físico o virtual- para readaptar sus precios según proceda.
Yo creía que una vez que se establecía un precio, se podía fluctuar un poco arriba, un poco abajo (descuentos, ofertas, promociones, …) Pero que la base del precio no variaba. Es decir, el precio es el que es, con un margen, más o menos flexible, con el que poder negociar. Sin embargo, el tema es mucho más complejo de lo que imaginaba. Ya solo pensando en la cantidad de modelos que hay para definir los precios puedes hacerte idea de la complejidad del tema.
Por eso, yo, cuando algo me parece demasiado complejo, tiendo a simplificarlo. Entonces, en este caso, pienso en el precio de un bien o servicio como algo que debe estar muy bien alineado con lo que el cliente esté dispuesto a pagar por ello.
Precio máximo y precio mínimo
Como todo en la vida, hay gente que está dispuesta a pagar una barbaridad por algo que, aparentemente, no lo merece. Y, gente que no. Para acotar estas fronteras podemos hablar del precio máximo aceptable y del precio mínimo. Con el primero, el cliente ignora la diferencia económica entre el nuevo producto/servicio que quiere y el producto/servicio de referencia. Para definir este precio hay detrás un importante análisis que evalúa el beneficio potencial que el consumidor espera obtener de ese producto/servicio.
Respecto al precio mínimo hay que decir que marca el límite por debajo del cual no es rentable ofrecer ese producto/servicio, salvo circunstancias excepcionales. Es el precio con el que se pretende recuperar lo invertido en la producción/adquisición del producto/servicio.
Por simplificarlo aún más, se podría decir que, el precio máximo viene condicionado por la demanda. Mientras que el precio mínimo viene condicionado por los costes.
Entre medias podemos hablar también de precios raros. Por ejemplo: 9,9 € en lugar de 10 €. Se juega con un elemento psicológico para hacer ver que el precio es más barato de lo que realmente es. O precios habituales, cuando se mantiene el precio de la unidad, pero se reduce el tamaño o el tiempo de lo que se ofrece.
Y, en el camino, hay otras muchas cuestiones a tener en cuenta para definir la estrategia de precios, como la competencia o la flexibilidad. Esta última será clave, además, para definir un precio u otro en función del comportamiento puntual del consumidor. En todo caso, en ¿Cómo definir el precio justo de un bien o servicio? puedes encontrar más detalles al respecto.
Métodos para la formulación de precios
Algunos de los modelos para la formulación de precios más habituales tienen que ver con el rendimiento objetivo, estimación de costes, condiciones de mercado, etc.
Si has llegado hasta aquí, ya te habrás hecho una idea de lo complicado que puede llegar a ser definir cuánto vale un producto/servicio. Habrás visto que la formulación de precios es, en sí misma, crítica. Y, por aquello de seguir simplificando, diré que lo es, al menos, por dos aspectos concretos:
- Contexto en el que se manejan muchas referencias
- Entorno extremadamente competitivo en el que el mercado se comporta como “Bolsas” y los precios cotizan continuamente.
Y, si a esta dificultad le sumas, además, la complicación de adaptar los precios conforme cambie algún criterio clave, creo que podrás adivinar el impacto de la tecnología en todo este proceso. En este vídeo podrás ver con más claridad lo que te digo.
Cuando se trabaja con muchas referencias, la formulación automática de precios es clave. Aunque hablemos de precios fijos anuales, hay un momento crítico en el cambio de ejercicio. Y la ayuda de una herramienta que permita formular y convertir rápidamente los precios puede marcar la diferencia respecto a los competidores.
En entornos que se comportan como “Bolsas” en los que la mercadería cambia de precio continuamente, la gestión es aún más compleja. En estos sectores, la utilización del software será clave. Sobre todo, por su capacidad para alimentar el precio de venta, en el momento en el que se produce la compra. Y respetar siempre el nuevo precio de compra que se acaba de introducir, aplicando el margen, configurado en el programa, para garantizar la rentabilidad de la operación. En ¿quieres saber cómo aumentar el margen de beneficio? se incluyen algunas fórmulas para calcularlo correctamente.
Formulación automática de precios
Las plataformas ERP agilizan y dan consistencia a la gestión comercial de una pyme. Y, por lo tanto, también a los procesos relacionados con la formulación de precios. Su papel es determinante, no solo por la cantidad de información que proporcionan. También porque simplifican la configuración de reglas de negocio y el control posterior de las políticas de descuento.
Las plataformas ERP agilizan y dan consistencia a la gestión comercial de una pyme. Porque simplifican la configuración de reglas de negocio y el control. Share on XPero, centrándonos en las funcionalidades que facilitan la definición y puesta en práctica de la política de precios, es importante detenernos un poco en la formulación automática de precios. En base a las reglas de negocio y los descuentos definidos previamente, el ERP agiliza los procesos. Y, también ayuda a que sean más eficientes. Hay muchos ejemplos que podemos mencionar: actualizaciones automáticas de listas de precio -precio de compra, precio recomendado, último precio, …- fechas de validez para una o varias listas de precio en función de las promociones o descuentos según la estacionalidad de las ventas, etc.
ERP para gestionar los precios
Entonces, si te preguntas, qué cosas concretas puede hacer un ERP, en el ámbito de la formulación automática de precios. Se me ocurren algunos ejemplos como estos:
- Definir diferentes precios de venta. Especialmente importante si hablamos de un almacén y diferentes tiendas
- Planificar el cambio de precios y su aplicación automática a partir de una fecha determinada
- Calcular o recalcular nuevos precios en función de diferentes criterios
- En el plano meramente operativo, crear, consultar o editar cambios de precios; y autorizar o deshabilitar cambios de precios.
- …
En definitiva, son muchas las ventajas de contar con un ERP para la formulación automática de precios. Si estás buscando un software que se adapte a tus necesidades descarga gratis la “Guía para elegir ERP”.. Si ya tienes un ERP, pero no te convence su funcionalidad o tienes dudas, quizá puedas descarga gratis la primera Guía para cambiar de ERP. Y, en todo caso, sabes que estamos a tu disposición para cualquier consulta, duda, ruego o sugerencia.