La tecnología no lo es todo, lo son las personas
Este año la transformación digital ha estado en boca de todos, y ha sido sin duda el tema estrella. Estamos inmersos en el cambio y en ocasiones, no nos damos cuenta de lo rápido que pasa el tiempo y de cómo todo evoluciona a nuestro alrededor, poco a poco.
Siempre hablamos del cambio como algo que está en la línea del futuro, pero en esta ocasión podemos afirmar que ya está aquí marcando nuestro presente. La nube, el big data o las ventajas del saas (pago por uso) son solo algunos ejemplos que demuestran que nuestro día a día es cada vez menos analógico.
También el ecommerce es uno de los grandes protagonistas de la temporada, con miles de propuestas y soluciones rápidas para los detalles de Navidad. Podemos ver listas y listas de regalos tecnológicos que van a triunfar en estas fiestas.
Parece que ya hemos asumido que la sociedad de la información está siendo sustituida por la sociedad tecnológica y nuestros dispositivos móviles son ya imprescindibles en nuestras vidas. Podemos encontrar tecnología casi en cualquier cosa y se han conseguido grandes avances en muchos campos.
El objetivo de Datisa es acercar la tecnología a las empresas, hacerla asequible y humana. Nosotros abogamos por aquella que mejora nuestra sociedad y nos facilita los procesos, pero aun siendo fabricantes de software, creemos que la tecnología no lo es todo.
Por eso nuestro brindis este año, queremos dedicárselo a las personas. Somos un equipo lleno de ilusión que trabaja cada día por mejorar. Cada uno forma parte del engranaje que lo mueve todo, y una tecnología no humanizada está vacía. Ha de estar pensada para ayudarnos a ser mejores, en todos los sentidos.
La Navidad hace que encendamos las luces para verlo todo mejor, nos permite salir de la rutina y observarlo todo con otra perspectiva. Nos hace brindar, y por tanto pensar en los demás. Nuestros doce deseos este año son para dar las gracias. A todas las personas que nos acompañan, a todos los que confían en nuestras herramientas y en nuestras soluciones, a todos los que están detrás y forman parte de nuestro trabajo. Por eso, esta Navidad tiene que ser una tecnonavidad humanizada.