Salir fuera parece que está siendo una de las principales vías de escape, dicho en el mejor sentido de la expresión, para las empresas españolas. Sin embargo, abordar un proceso de internacionalización, no es tarea sencilla ya que deben tenerse en cuenta muchas variables para alcanzar el éxito en mercados muy diferentes al nacional.
El ICEX España, Exportación e Inversiones y el Centro de Estudios Económicos y Comerciales (CECO) acaban de publicar la primera edición del “Manual de Internacionalización. Técnicas, herramientas y estrategias necesarias para afrontar con éxito el proceso de internacionalización”. Se trata de una guía completa y rigurosa que incluye todos los aspectos relevantes para iniciar, mantener o incrementar la actividad internacional, incluyendo herramientas y técnicas indispensables en el proceso de internacionalización.
Es un manual muy interesante ya que en él se contemplan áreas estratégicas para la internacionalización empresarial que van desde un análisis del entorno económico internacional hasta la evaluación de las herramientas y técnicas necesarias para definir la estrategia y el marketing internacional, el estudio de los medios financieros, los aspectos relacionados con la logística y el transporte internacional o los temas jurídicos más destacables. El libro también aborda el acceso a los mercados multilaterales, las TIC y el entorno digital.
Innovación y tecnología, dos pilares estratégicos
Los proyectos de internacionalización de las empresas no sólo se derivan de la actual situación económica que vivimos en nuestro país ya que, si bien es una situación quizá más aguda que la que pueden estar viviendo otras áreas geográficas como Francia, Alemania o Re¡no Unido, por quedarnos en Europa, lo cierto es que estamos ante un panorama de recesión económica, podríamos decir, casi mundial.
En este sentido, cabe destacar que las empresas españolas deciden apostar por otros entornos, al tomar conciencia de la globalización de los mercados, de la apertura económica y de la enorme competencia que existe dentro de las fronteras nacionales. Éstas podrían ser algunas de las principales razones por las que se justifica una estrategia de internacionalización.
Para afrontar la entrada en nuevos mercados, la tecnología y la innovación deben ser factores a tener muy en cuenta y sobre ellos deben apoyarse la mayor parte de los procesos relacionados con dicha estrategia. Al hilo de esto, es importante hacer referencia a los sistemas de gestión sobre los que las empresas administrarán toda la información relativa a áreas tan estratégicas para ellas como la contabilidad, la tesorería, el inmovilizado, la producción o la gestión comercial.
En este sentido, los sistemas ERP deberán ser capaces de adaptarse a la nueva situación que genera, por ejemplo, la utilización de una moneda diferente, o un idioma distinto. Deberán presentarse como soluciones flexibles, dinámicas, fáciles de utilizar y, en la medida de lo posible, modulares, que permitan ir ampliando funcionalidades según vaya incrementando la empresa su actividad, su radio de acción o, su negocio, en definitiva.
Por citar algún ejemplo, en el apartado de contabilidad, indispensable para cualquier organización, es importante que estos sistemas de gestión incorporen funcionalidades relacionadas con la Moneda Extranjera que permitan contabilizar en moneda diferente a la nacional como las compras y las ventas, o controlar los cobros de créditos y los pagos de deudas en divisa extranjera. Es decir, que facilite amplias capacidades para mantener y gestionar la empresa en diferentes divisas.