El Renting Tecnológico
En nuestro anterior post hablábamos de la necesidad que tienen las pymes de invertir en TI para aumentar su productividad. Uno de los problemas de la situación actual es encontrar financiación para poder acceder a esa tecnología. Una de las posibilidades que barajan cada vez más empresas es utilizar el renting tecnológico como una herramienta de financiación.
El renting es un modo de mantener actualizada la tecnología de las empresas y al mismo tiempo que reducir costes y no tiener un impacto negativo en su capital.
Los datos de mercado, en cuanto al crecimiento del número de operaciones de renting al año, se sitúan entorno al 18%, según IT Renting. Conforme a sus cifras, los productos más solicitados para la adquisición mediante renting continúan siendo los ordenadores 60% (Pcs, Portátiles y servidores), así como los servicios de mantenimiento. Pero se está experimentando un avance importante en licencias y aplicaciones (ERP, CRM), así como los servicios de implantación, parametrización y desarrollos.
¿Qué es el renting tecnológico?
El renting se resume en un contrato mercantil, en virtud del cual, el arrendador (entidad financiera, una empresa especializada en renting, o bien con la propia empresa fabricante), siguiendo las instrucciones expresas del arrendatario, adquiere en nombre propio determinados bienes con el fin de alquilárselos para que éste los utilice por el tiempo que se determine en el contrato, pudiendo ser sustituidos, reemplazados por otros o ampliarlos durante el período contractual normalmente de uno a tres años.
Los contratos de renting tecnológico suelen incluir equipos informáticos y además servicios asociados complementarios que aseguren dicho bien. Lo que mucha gente no sabe es que el software también se puede financiar a través de esta figura.
En el caso del renting tecnológico se puede incluir en la cuota el seguro de daños propios y robo, asesoramiento, asistencia técnica, actualizaciones y un nivel de mantenimiento a elegir por el usuario.
El renting se suele confundir con el leasing. La diferencia fundamental con el leasing es que con el renting no se pretende que ese bien acabe siendo propiedad de la empresa, sino más bien que una empresa especializada en renting lo adquiera, arriende y permita el cambio del mismo o su actualización en el momento que se precise.
Ventajas
La principal ventaja es de tipo económica y financiera, ya que nos permite acceder a la tecnología que necesita nuestra empresa sin realizar grandes desembolsos de dinero por lo que al realizarse el pago en forma de alquiler, facilita las previsiones de Tesorería. No estamos pagando en ningún momento carga financiera, aunque como un alquiler, también está sujeto a IVA. Y lo más importante la renta de alquiler es un gasto deducible al 100% al igual que el IVA.
Por otro lado mejora los ratios de endeudamiento ya que las operaciones de renting no figuran en el Balance: al ser un alquiler, los bienes arrendados no figuran en el activo de la compañía, lo cual permite mantener la capacidad de endeudamiento con su banco y aumentar la rentabilidad sobre los activos.
Admite una mayor flexibilidad antes los avances tecnológicos y las necesidades de la empresa ya que permite la posibilidad de actualización o ampliación de los productos contratados.